
El problema es que a mi pareja no le gusta que me masturbe. Cree que al tener pareja eso no debe ocurrir. Me dice que si tengo ganas de sexo, que se lo pida a él. En mi opinión son cosas distintas, pero ya dudo de todo porque percibo que él se siente muy herido. La realidad es que en ocasiones me apetece un momento de intimidad conmigo misma. Se lo he intentado explicar, pero siempre hemos acabado discutiendo y con un gran disgusto. Gracias por la atención y saludos.
Así por eso, a finales del siglo XIX puede que incluso antes se llegaban a atar las manos de los chicos jóvenes tras la lomo para ir a dormir para evitar la tentación impura de los tocamientos. Y lo que tienen la generalidad de los hombres es un ambición imperioso de masturbarse porque saben que no hay nada de malo en ello, que puede aportar placer y otras muchas cosas. Y esa culpabilidad es fruto de, entre otras cosas, la creencia religiosa de que se desperdiciaban vidas con este juego. Os invito a descubrir la historia de Onan quien dio nombre al masturbación. Supongo que lo conocéis y, estrella, preguntad o investigad.
Es por eso que incluso se utiliza en terapia sexual y de galán. Mejora el sueño gracias a la liberación de endorfinas y serotonina. Favorece la relajación y el bienestar. Es bueno para el autodescubrimiento y para mejorar la autoconfianza de uno mismo respecto al sexo.
Muchos cristianos han hablado y escrito sobre el tema, algunos de ellos con un sincero desacuerdo. Si deseas conocer cómo respondí a esta pregunta en el pasado, puedes leerlo aquí. No fue porque no supiera la respuesta. Probablemente incluso tengas tu propia dictamen. Durante mucho tiempo he sospechado que la masturbación es menos una cuestión de moralidad cristiana que de granazón cristiana. Cuando somos inmaduros en nuestro caminar con Dios, buscamos reglas. Discutimos sobre las que consideramos poco amorosas y debatimos las líneas morales que parecen nebulosas. Pablo escribió en Romanos 6 que aquellos que no conocen al Señor son esclavos de sus propios deseos carnales.