Estimula nuestra curiosidad ya que nos proporciona pistas sobre nuestros orígenes y despierta una necesidad instintiva de saber de dónde venimos y quiénes somos. Hace mucho que se sabe de la existencia de los prehistóricos. El hombre de Cromañón fue identificado en Louis Lartet, Dordoña. Los neandertales se descubrieron mucho antes, en Bélgica.
Gruta de Altamira Ritual para propiciar la caza La primera de la que se va a hablar fue la dada en por el arqueólogo de origen francés, Salomón Reinach. Salomón afirmó que las pinturas de animales eran una especie de ritual con el que se pretendía propiciar la batida. Esta idea estuvo presente durante décadas pero ya no tiene tanta importancia. Magia Premonitoria Abbé Breuil arqueólogo y prehistoriador francés y Henri Begouën boticario en derecho y doctor honoris amovible afirmaron que, con sus dibujos, los prehistóricos pretendían influir en el resultado de la caza. Así, él opinaba que las pinturas rupestres no estaban distribuidas de forma aleatoria y que tenían una razón. Formaban estructuras binarias. Sus trabajos animan a la actuación de las pinturas como narraciones mitológicas que se repiten en distintas cuevas.
Los hombres y, en mayor medida, las mujeres invierten tiempo y dinero para conseguir un bronceado perfecto. Sin bloqueo, esto no ha sido siempre así. Era un orgullo para los padres tener hijos de color blanco. Solo los padres les podían llevar alimentación y apenas salían para jugar con otros niños y respirar un algo de aire fresco. Podría decirse que su belleza los condenaba a una infancia de reclusión y aburrimiento. No se conocen realmente los detalles de este antiguo ritual. La virginidad no era un asunto tan relevante como la fertilidad en las creencias de los pueblos de la Polinesia. De hecho, se cree que tal tiempo las jóvenes fueran instruidas por mujeres mayores en actos de iniciación venéreo y artes amatorias.